EDITORIAL DEL LECTOR: LA EXPOSICIÓN AL PARAQUAT CONTRIBUYE AL RACISMO SISTÉMICO Y LA ENFERMEDAD DE PARKINSON ENTRE LOS TRABAJADORES AGRÍCOLAS LATINOS Y LAS COMUNIDADES CERCANAS

Por Miguel Leyva

Foto: Trabajadores agrícolas, CC-NC vía Bing

4 de agosto de 2023 (San Diego) -- El racismo sistémico afecta casi todas las facetas de la vida de las personas de color. En todo el país existen graves disparidades raciales en cuanto a representación, tierra y dinero dentro del campo agrícola. Hasta el 83% de los trabajadores agrícolas en todo el país son latinos y, a diferencia de la mayoría de los trabajadores, no se benefician de la protección de las horas extras. El condado de San Diego alberga el noveno sector agroindustrial más lucrativo de California, que genera más de mil millones de dólares al año. Además, aproximadamente el 90% de sus ingresos agrícolas se derivan de industrias agrícolas que requieren mucha mano de obra. Aunque brindan servicios esenciales, los trabajadores agrícolas latinos generalmente ganan salarios bajos y deben soportar condiciones de vida y de trabajo deficientes. Aproximadamente el 35% de la población del condado de San Diego es latina y muchas de estas personas trabajan en la agricultura.

Como una de las industrias más propensas a accidentes, la agricultura tiene la tasa de mortalidad más alta del país. Los trabajadores agrícolas enfrentan innumerables riesgos de seguridad, salud, ambientales, biológicos y respiratorios todos los días.

Usan regularmente cuchillos y azadas, trabajan en escaleras y utilizan maquinaria en sus talleres. Cuando estas herramientas se utilizan o se mantienen de forma inadecuada, tienen el potencial de causar lesiones graves e incluso mortales. Además, los trabajadores agrícolas corren el riesgo de asfixiarse o hundirse cuando trabajan con contenedores y silos de granos. Aún así, una amenaza más insidiosa para la salud de los trabajadores agrícolas es la exposición a pesticidas, que ocurre con frecuencia en el campo agrícola. El paraquat, un herbicida altamente tóxico, se aplica habitualmente a los cultivos en el condado de San Diego, aunque muchos países lo han prohibido debido a su potencial para causar la enfermedad de Parkinson.

La exposición al paraquat aumenta significativamente el riesgo de enfermedad de Parkinson en los trabajadores agrícolas latinos

Cada año, se utilizan más de 8 millones de libras de paraquat en todo el país en cultivos como maíz, soja, algodón, trigo, almendras, batatas y fresas. En el condado de San Diego, se aplican casi 52 libras del herbicida por acre al año. El paraquat se vende en Estados Unidos con docenas de nombres, incluidos Gramoxone, Firestorm, Parazone, Helmquat y Quick-Quat. En 2018, el paraquat fue el único herbicida de los cinco principales que aumentó en acres tratados, con 104,207 acres tratados, un aumento del 8% en comparación con los años anteriores. La exposición al paraquat se asocia con un riesgo 150% mayor de desarrollar la enfermedad de Parkinson, y los trabajadores agrícolas latinos son el grupo demográfico más vulnerable.

Además, la exposición al paraquat que ocurre dentro de 1,600 pies de una casa aumenta el riesgo de enfermedad de Parkinson en un 75%, por lo que las familias de los trabajadores agrícolas latinos y las personas que viven cerca de las comunidades agrícolas también están en peligro. El paraquat es neurotóxico, lo que significa que la exposición tiene un alto costo en el cerebro, ya que una vez que una persona inhala el herbicida, los vapores pueden dañar irreversiblemente la sustancia negra, una región del cerebro responsable del control del movimiento. Cuando esta parte del cerebro se ve afectada por la exposición al paraquat, la persona comienza a presentar síntomas de la enfermedad de Parkinson, como dificultad con el equilibrio y la coordinación, temblores, rigidez muscular y temblores.

Combatir el racismo sistémico entre los trabajadores agrícolas latinos

Los trabajadores agrícolas son trabajadores esenciales, ya que nuestro suministro de alimentos depende únicamente de su trabajo continuo. A pesar de numerosos estudios que documentan el nivel desproporcionado de enfermedades entre los trabajadores agrícolas latinos, la EPA descartó la exposición ocupacional a pesticidas tóxicos que ocurre en estas personas vulnerables. De hecho, el racismo sistémico está incorporado en las evaluaciones de riesgos de la EPA, ya que pasan por alto a las personas de color. Las evaluaciones de riesgos no incluyen la exposición a múltiples sustancias químicas, lo cual es muy común entre los trabajadores agrícolas. Además, hace varios años, la agencia admitió que los trabajadores agrícolas todavía estarían expuestos a niveles de pesticidas por encima de los límites de exposición seguros de la agencia, incluso con el máximo equipo de protección y controles de ingeniería factibles.

La EPA establece estándares de protección para los trabajadores agrícolas bajo la Ley Federal de Insecticidas, Fungicidas y Rodenticidas. Sin embargo, los estándares originales se establecieron después de audiencias de campo en la década de 1970 en las que los agricultores, no los trabajadores agrícolas, tenían algo que decir. Una solución para lograr justicia para los trabajadores agrícolas latinos implicaría que el Congreso mejore la ley relativa a la protección de los trabajadores agrícolas con respecto a la exposición al paraquat y a otros pesticidas tóxicos. Debería restaurar la jurisdicción parcial sobre la regulación de los riesgos ocupacionales relacionados con pesticidas a OSHA para mejorar la coordinación entre esta agencia y la EPA. El trabajo agrícola es un trabajo físico muy exigente y peligroso, por lo que se deben tomar medidas radicales para abolir el racismo sistémico en la agricultura.

Miguel Leyva es administrador de casos en Atraxia Law en Rancho Bernardo. Brinda apoyo a los trabajadores agrícolas lesionados por la exposición al paraquat. Miguel ayuda a las personas con la enfermedad de Parkinson a recopilar y organizar información relevante sobre sus lesiones para que posteriormente puedan presentar un reclamo.

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